En los últimos años, han estado en la palestra los potenciales cambios que se le quieren realizar al actual sistema político chileno, tanto en medio del proceso constituyente, como en la actualidad.
Nuestro país mantiene separado en tres los poderes del Estado, siendo estos el Judicial, Ejecutivo y Legislativo. Es en este último en el que se quieren ingresar modificaciones.
En diálogos entre el Gobierno y el Congreso, se evalúa instalar un umbral mínimo del 5% de votación para el reconocimiento legal de los partidos políticos cuando se voten escaños al parlamento.
En tanto, otra de las propuestas busca que los diputados o senadores pierdan el asiento en el Congreso en caso de renunciar a su colectividad, a los cual se les define como díscolos.
“Hay muy poco plazo para hacer reformas al sistema político, porque vamos a entrar en las elecciones parlamentarias y presidenciales”, señaló el diputado Jaime Mulet.
En contraparte, el parlamentario Iván Flores, indicó que “independiente de que cualquier momento es bueno para legislar, creo que es mejor dejarlo para momentos de quietud política”, en relación con esta iniciativa.
Por su parte, el exjefe de asesores del gobierno del Presidente Piñera, Cristián Larroulet, recalcó que es difícil gobernar y llegar acuerdos con la cantidad de partidos políticos que existen y, por ende, urge una reforma al sistema político.