“A los 14 años comencé a soñar con ser profesional. Y me di cuenta de que, si me ponía metas, podía cumplirlo. Y aunque queda mucho camino por recorrer, varias cosas se han hecho reales”, cuenta el tierramarillano Ignacio Tapia, ciclista de BMX. El deportista, de 23 años, es uno de los de mayor proyección a nivel nacional en su disciplina y apunta a llegar a los próximos Juegos Olímpicos de Los Ángeles 2028.
“El camino del deporte requiere mucha paciencia, sacrificio y equilibrio emocional”, dice Ignacio, quién actualmente marcha sexto en el ranking nacional y es el ciclista más joven de la lista. Su objetivo es ser campeón de Chile.
“Caserones ha sido un pilar fundamental en mi carrera en el último tiempo y no tendría los resultados que hoy tengo sin ese apoyo”, explica. “Hace dos años, llegué con mi bicicleta y mochila a Santiago. Dormí en casas de amigos y la alimentación no era la mejor. Trabajaba y entrenaba, ya que los recursos eran pocos. Entonces la compañía me dio la mano para completar y cubrir los gastos de un atleta”, agrega.
Gracias a dicho aporte, Ignacio ha podido completar una exitosa estadía en Costa Rica, en uno de los mejores centros de entrenamiento a nivel americano. “El impacto ya se está viendo, los números han mejorado. Me siento responsable de hacer que mi deporte crezca”, concluye.
Contribuyendo el deporte colectivo
“Recibimos alumnos de distintos colegios de Tierra Amarilla y Copiapó. Actualmente, participan cerca de 100 niños y jóvenes de las clases gratuitas que impartimos”, dice el técnico y secretario del Club de Ajedrez Enroque, Patricio Olmos. “En esta labor, el aporte de Caserones ha sido fundamental, ya que hemos fortalecido la difusión y hemos podido realizar muy buenos torneos”, agrega.
“Tenemos alumnos y alumnas que van desde los 5 a los 17 años, quienes han podido participar en torneos nacionales, entre ellos, un certamen en Tierra Amarilla, donde asistieron más de 100 personas provenientes de Antofagasta, Santiago y otros puntos del país, así como un torneo nacional federado, válido para el ranking nacional”, dice
“Caserones ha sido nuestro principal apoyo y es la única compañía que nos ha contribuido en la difusión de los torneos”, afirma.
Una experiencia similar ha tenido Manuel Bahamondes, coach del Team Bahamondes Golden Striking de Tierra Amarilla, agrupación deportiva de kickboxing y artes marciales mixtas de larga tradición en la comuna. “Tenemos nivel nacional y mundial. Hay cerca de 100 personas activas, que van desde los 3 hasta cerca de los 60 años. Vienen alumnos y alumnas desde Copiapó hasta la parte alta del valle. Tenemos seis campeones nacionales, sudamericanos y buenas presentaciones en Estados Unidos”, dice.
“Caserones ha sido un siete. Uno de sus grandes aportes nos ayudó a concretar un viaje a Estados Unidos, donde estuvimos tres meses, así como un sauna para el corte de peso de los luchadores”, agrega.
Fútbol local
El Centro de Entrenamiento y Formación Futbolística, CEFF, se creó en 2009 en Copiapó con distintas categorías infantiles, cuyo objetivo es formar deportistas para la competencia profesional.
“En la actualidad ya tenemos 7 años compitiendo en la tercera división, que ya es prácticamente fútbol profesional. Estamos muy orgullos, porque somos la segunda institución más importante de la comuna”, afirma Rodrigo González, presidente del Club Deportivo Social y Cultural CEFF.
“Tenemos 150 niños en las divisiones inferiores y 35 jugadores en el primer equipo”, indica. “El aporte de Caserones ha sido fundamental, porque, aparte de competir en torneos locales, porque hemos podido participar de mejor forma en certámenes sudamericanos en Argentina, Perú y Paraguay, además de visitar cuatro veces a Europa”, agrega.
El objetivo de estos aportes se enmarca en la Política de Relacionamiento Comunitario de Caserones, ya que no solo se busca potenciar la carrera de deportistas profesionales, sino que promover la vida sana y generar referentes positivos para las comunidades, especialmente de Tierra Amarilla.