Las personas mayores en Chile enfrentan desafíos alimentarios. Los cambios fisiológicos, psicológicos y sociales han afectado su apetito y capacidad de ingerir alimentos. Por este motivo, la Facultad de Ciencias de la Salud de la Universidad de Antofagasta junto al Centro Interuniversitario de Envejecimiento Saludable (CIES) concretaron el proyecto denominado “Caracterización del patrón alimentario y perfil sociosanitario de personas mayores chilenas”, un trabajo colaborativo de investigación-docencia que permitió recolectar datos relevantes de las personas mayores que participaron de este estudio.
Al respecto, la académica y representante institucional del Centro Interuniversitario de Envejecimiento Saludable (CIES) e investigadora coordinadora de la macrozona norte del proyecto, dra. Sigrid Sanzana se refirió a la importancia del proyecto, “considerando que la dietas de las personas mayores a menudo carecen de nutrientes esenciales, lo que incrementa el riesgo de padecer enfermedades. Aunque algunos subgrupos pueden tener una dieta adecuada, la malnutrición y la falta de acceso a alimentos nutritivos son problemas recurrentes”, explicó.
Trabajo en equipo
Uno de los ejes que dio vida a este proyecto, fue la estrecha colaboración y compromiso de las investigadoras integrantes del CIES, las doctoras Mónica Jorquera e Sigrid Sanzana, quienes junto al equipo docente y estudiantes liderados por la académica coordinadora de la asignatura Salud y Comunidad, dra. Natalia Becerra, lograron aplicar la encuesta socio-sanitaria sobre consumo de alimentos en personas mayores.
En este sentido, el representante del equipo médico de la carrera de medicina de la UA, Alberto Torres, destacó el impacto que esta investigación tiene para los estudiantes.
“Cabe señalar que los estudiantes, en el primer semestre de primer año de su formación, realizan un levantamiento de información sobre percepciones de pacientes de CESFAMS sobre determinantes sociales de la salud, por lo cual la actividad realizada en CDR marca una continuidad en la formación integral de profesionales médicos”, acotó.
Las personas mayores son importantes
De esta manera, el proyecto «Caracterización del patrón alimentario y perfil sociosanitario de personas mayores chilenas» se enfoca en determinar la relación entre el territorio, los hábitos alimentarios y las condiciones socioeconómicas, emocionales y de salud de la población de adultos mayores. El objetivo es obtener una visión integral de su estado nutricional y los factores que influyen en su bienestar.
Se espera que los resultados del estudio sirvan para informar y diseñar políticas públicas que promuevan una alimentación saludable y sostenible para las personas mayores. Además, los datos proporcionarán insumos para programas específicos orientados a mejorar la seguridad alimentaria y el acceso a alimentos nutritivos, considerando las particularidades territoriales de cada macrozona.
A+S
En cuanto al rol del plantel estatal, se destaca la implementación de una propuesta pedagógica basada en el modelo de aprendizaje más servicio (A+S). Esta metodología integra la formación académica con el servicio a la comunidad, permitiendo que los estudiantes de medicina de la asignatura Salud y Comunidad participaran activamente en el estudio.
“El trabajo colaborativo nos entrega herramientas para alcanzar objetivos de manera productiva y eficiente, fomentando un ambiente de apoyo mutuo para lograr mejores resultados tanto individual como colectivamente”, expresó el estudiante de primer año de medicina, Ian Carvajal.
En la misma línea, la directora del Centro Diurno Referencial, Ingrid Sáez valoró el trabajo colaborativo investigación-docencia.
“El trabajo en el Centro Diurno Referencial (CDR) de Antofagasta, en colaboración con los alumnos de Medicina y el CIES, es clave para mejorar la calidad de vida de los adultos mayores. A través de encuestas, se recopila información valiosa que promueve una atención más informada y sensible a sus necesidades, fortaleciendo la atención interdisciplinaria y los lazos entre generaciones para lograr un enfoque más empático e integral”, puntualizó.
El estudio revelará si existen diferencias significativas en el patrón alimentario y el perfil sociosanitario de las personas mayores según su ubicación geográfica. Estas diferencias se podrán relacionar con factores tales como: socioeconómicos, acceso a servicios de salud y disponibilidad de alimentos. Se tendrá información sobre deficiencias nutricionales, por ejemplo, de vitamina D, enfermedades crónicas y vinculadas al proceso de envejecimiento.