Hace más de una década, en el sector de Pintacura, en un predio que antes era trabajado por sus padres, la señora Rosa Céspedes, una pequeña agricultora illapelina, inició junto a su esposo la crianza de cabras y ovejas para la elaboración de quesos. Esta sacrificada labor ha sido aún más ardua dada la escasez de precipitaciones que ha afectado a la zona durante 15 años, y que ha obligado a esta productora a buscar otras formas para abastecer de alimento a su ganado.
Por ello, la señora Rosa no lo dudó y postuló su proyecto de acumulación a la Ley de Riego, iniciativa que fue bonificada y que le ha permitido asegurar el agua para el riego y así continuar con la producción de forraje.
El proyecto, bonificado con más de 11 millones de pesos a través un concurso para la pequeña agricultura y la seguridad alimentaria de la Ley de Riego, consistente en la construcción e impermeabilización de un embalse de regulación corta con una capacidad de 507 metros cúbicos
Tras visitar a esta pequeña productora y conocer su proyecto, el Coordinador Regional de Coquimbo de la CNR, Álvaro Espinoza, reiteró que “uno de los lineamientos entregados por el gobierno del Presidente Gabriel Boric apunta hacia la entrega de apoyos concretos a quienes menos acceso han tenido a la Ley de Riego. Es en este sentido que hemos puesto como uno de los ejes prioritarios de esta gestión acompañar a la pequeña agricultura, y de manera muy especial a las mujeres rurales para que puedan acceder a diversas obras de riego, especialmente, frente a la crisis climática que afecta a la región y que no solo le permite continuar con su actividad, sino que, además, le facilitan las labores asociadas al riego”.
En la oportunidad, la pequeña agricultora agradeció el apoyo de la CNR para ejecutar este proyecto. “La Ley de Riego es un gran apoyo, me permite tener pasto y poder regarlo y ahora tengo, por lo menos, donde guardar agua. Cuando no llueve o llueve muy poco tenemos un gran problema, porque uno debe tener pasto para los animales y debido a eso hicimos ese tranque que nos permitirá llevar agüita para las cabras, para los cabritos, para las ovejas, para todo. Por eso es tan importante que la Comisión Nacional de Riego también esté apoyando a los pequeños agricultores y a las mujeres en especial. Esta es la herencia de los papás y hay que mantenerla”.