Ciento veinte siete millones de pesos necesita Karem Chacana, la presidenta de la Fundación Somos Up, para hacer realidad su sueño de contar con un plan integral de intervenciones a niños, niñas y jóvenes con discapacidad, síndrome de Down o neurodivergencias que son beneficiarios de la agrupación, durante un año, en Antofagasta.
Pero ahora está más cerca de alcanzarlo tras ser aprobado en el banco de datos de la Ley 19.885, que regula las donaciones que realizan empresas a agrupaciones vinculadas con personas con discapacidad, grupos vulnerables en rehabilitación de drogas, obteniendo una rebaja tributaria como beneficio por este aporte.
De esta forma desde este mes, tanto empresas privadas como personas naturales pueden realizar donaciones a este proyecto, contribuyendo a alcanzar la meta que permitirá ejecutarlo durante un año en Antofagasta.
Sin embargo, el camino no fue fácil y debió esperar dos años para que, con las herramientas entregadas en la Universidad Social, proyecto de Alianza Antofagasta, que pudo reestructurarlo y presentarlo con éxito.
¿A quiénes beneficiaría este proyecto directamente?
- Este proyecto es para 30 niños, niñas y jóvenes con discapacidad, síndrome de Down y neurodivergencias, y además contempla la intervención psicológica para sus cuidadores, por lo que en total son 60 personas beneficiarias. Se trata de una intervención integral en rehabilitación con profesionales que los acompañen durante un año, brindando una atención de calidad y contribuyendo a mejorar cada uno de los procesos de rehabilitación individual.
- ¿Cómo te ayudó la Universidad Social a mejorar tu proyecto?
- La primera vez que postulamos al proyecto fue un caos. Eso fue hace dos años y tuvimos que dejarlo. El proyecto en sí es complejo, sobre todo su estructuración. Cuando llegué a la Universidad Social yo venía con eso en mente, que debía lograr rearmar el proyecto aplicando lo que allí aprendiera.
La primera parte, en la Universidad Santo Tomás, fue clave porque nos enseñó todo acerca de la formulación, que era en lo que estaba al debe. Yo empezaba de atrás para adelante. Después, en la Universidad de Antofagasta, hubo una profesora que nos enseñó a ordenar los presupuestos, con lo cual pude terminar de darle forma. Y al finalizar todo el proceso y aplicar todos esos conocimientos adquiridos, logramos sacar a flote un proyecto que estaba estancado hace dos años. Para eso la Universidad Social de Alianza Antofagasta fue vital en todos los aspectos, para lograr reestructurar el proyecto en sí.
- ¿Cómo fue el proceso para lograr “subir” este proyecto al banco de datos?
- Es un formato estándar, que es bastante largo. Son como 14 hojas que debes llenar. Y después pasas a una comisión nacional, que va a evaluar tu proyecto y revisar si va en la línea de tus estatutos, si es rentable y si es concordante con lo que tu agrupación hace. Después de pasar por esa evaluación recién obtienes este certificado que te permite mostrar tu proyecto a los posibles donantes.
- ¿Desde cuándo existe Somos Up y cuál es su objetivo en la región?
- Nuestra agrupación nació el 18 de noviembre de 2017 gracias a una iniciativa conjunta de distintas familias con hijos e hijas con síndrome de Down, para después ir ampliándose a familias con niños con autismo y otras neurodivergencias. La principal misión de Somos Up es promover el desarrollo integral de las personas con discapacidad en Antofagasta.
La malla curricular de la primera versión de Universidad Social fue codiseñada por dirigentes sociales y un equipo compuesto por académicos de la Universidad de Antofagasta, Universidad Santo Tomás y AIEP Antofagasta, que incluyó cursos Formulación de Proyectos, Sostenibilidad, Control Interno, entre otros.
Alianza Antofagasta, iniciativa pública-privada-académica-ciudadana que contribuye a fortalecer el capital social, potenciando espacios de confianza que facilitan la acción colectiva para transitar hacia el desarrollo sostenible.
Agrupa a diversos actores de la ciudad en torno a la generación colectiva de conocimiento en cada uno de sus dos ejes estratégicos: Cultura pro-Innovación y Sentido de Pertenencia, con el propósito de inspirar el Orgullo por Antofagasta. Siendo entendido por sus colaboradores como una herramienta de transformación social en su capacidad de aportar a la cohesión social al tender puentes de colaboración que contribuyan a disminuir las asimetrías existentes y generar una relación virtuosa en la sociedad.
Integran su consejo consultivo: Antofagasta Minerals, Fundación Minera Escondida, Puerto Antofagasta, SQM, Creo Antofagasta, Aguas Antofagasta, Cámara Chilena de la Construcción, El Mercurio de Antofagasta, Gobierno Regional, Universidad Católica del Norte, Universidad de Antofagasta, Universidad Santo Tomás y AIEP Antofagasta.