Durante el año pasado, varios colegios de Calama presentaron acciones legales en los Tribunales de Familia para paliar los recurrentes casos de inasistencia, entendiendo que se llegó a acumular un índice cercano al 15% durante el 2023.
En ese periodo, los establecimientos revisaron en detalle el caso de cada uno de los estudiantes que frecuentemente registraron faltas, con el fin de asegurar sus derechos, evitar la deserción escolar y facilitar la entrega de vestuario, útiles, entre otros.
Pese a que este año la situación es diferente, desde la Corporación Municipal de Desarrollo Social de Calama no descartan tomar acciones similares si existen estudiantes con registros críticos.
Al respecto, la diputada Yovana Ahumada, sostuvo que "la decisión de los colegios es compresible. Sin embargo, es importante que estas acciones legales vayan acompañadas de un mayor apoyo y acompañamiento a las familias para abordar las raíces del problema".
De hecho, con la llegada de las lluvias, bajas temperaturas y virus respiratorios, varios apoderados han evitado llevar a sus hijos a los colegios. Lo anterior ha provocado una leve disminución de asistencias donde los más afectados son los jardines infantiles, escuelas de párvulos y de primer ciclo de enseñanza básica.
Por este motivo, desde Dirección Provincial de Educación de la provincia de El Loa sostienen que, si los niveles vuelven a descender, esperan que el Ministerio de Educación establezca las mismas medidas que se implementaron en períodos anteriores, como la flexibilidad horaria para que los estudiantes ingresen a clases más tarde.